El Parque Metropolitano Oeste de Barriomar ya va tomando forma. Los primeros 37.786 metros cuadrados (casi cuatro hectáreas) del que será el pulmón verde más importante de la ciudad estarán disponibles para su disfrute en el primer semestre de 2023 si los planes del Ayuntamiento se desarrollan como está previsto. Un proyecto que fue definido como «la columna vertebral del nuevo urbanismo en Murcia».
La inversión, que supera los cinco millones de euros, se financiará en un 80% con fondos europeos ‘Next Generation’. El 20% restante correrá a cargo de las arcas municipales. Y los primeros trabajos comenzarán en el último trimestre del año .
“Hemos pasado del Toyo Ito del siglo XX al parque Metropolitano del siglo XXI”, enfatizó ayer el alcalde de Murcia, José Antonio Serrano, durante la presentación del diseño definitivo de la nueva área verde, que en su conjunto y tras acabar las distintas fases, llegará a tener 200.000 metros cuadrados. Al mencionar al arquitecto japonés Toyo Ito, el alcalde se refería al proyecto de Parque Oeste que se diseñó y presentó en 2007 siendo alcalde Miguel Ángel Cámara, pero que quedó aparcado por la crisis del ladrillo de 2008 y años sucesivos.
Esta primera fase del proyecto, expuesta ayer, se centra en la zona «más urbana» y con más equipamientos del parque. También es la más cercana al barrio y a la autovía A30 con la que colinda. «Permitirá conectar Barriomar con el resto de la ciudad, con lo que suturamos la herida abierta desde hace años con el barrio y su abandono», apuntó Serrano. Habrá itinerarios peatonales y ciclistas y una pasarela sobre el río Segura que permitirá su conexión natural con el centro urbano de la ciudad y con el espacio de La Contraparada.
“Va a suponer una auténtica revolución para el municipio”, dijo el alcalde, quien añadió que “somos conscientes del abandono histórico que ha sufrido Barriomar; nuestro objetivo firme es sacar adelante este proyecto”.
Mitigar las inundaciones, a través de un sistema de drenaje y las infiltraciones de las escorrentías, será otra de sus virtudes.
En la presentación acompañaron al alcalde los concejales de Barrios y Pedanías y Urbanismo, Ainhoa Sánchez y Andrés Guerrero, respectivamente; y los técnicos de Urbamusa autores del proyecto, el arquitecto Guillermo Jiménez y la ingeniera de Caminos y experta en sistemas urbanos de drenaje sostenible Ana Martínez Rodríguez.
Serrano indicó que había que esperar al permiso de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) para actuar sobre el río, en concreto con la pasarela peatonal y ciclista proyectada, y para la que «ya hemos recibido el informe positivo». La concejala Sánchez apuntó que, en colaboración con el Colegio de Arquitectos, se estaban acabando las bases para sacar un concurso de ideas para su diseño.
Evacuación de lluvias
Tres son los principales pilares en los que se basa el diseño: una gran plaza arbolada con sombra natural que, en el extremo cercano a la autovía, permitirá aislar el parque del ruido y la visión de los coches y en la que habrá un anfiteatro y espacios para casetas. De esta zona partirán itinerarios hacia el sur, este y oeste del municipio. Un segundo pilar, el cercano a la carretera de Alcantarilla, donde se instalarán zonas de equipamiento de gerontogimnasia, ‘fitness’ (adaptados a personas con movilidad reducida) y juegos infantiles. El tercer pilar, en dirección al casco urbano y La Contraparada contará con una pasarela, será la zona más naturalizada y llegará hasta Rincón de Seca.
El proyecto prevé sistemas urbanos de drenaje sostenible que ayudarán a mitigar el riesgo de inundaciones.
El arquitecto Jiménez indicó que en total se plantarán 500 árboles y 5.000 arbustos autóctonos y que la superficie arbolada será de 16.245 metros cuadrados.
Todo el parque contará con un sistema urbano de drenaje sostenible, conocido como SUDS, que permitirá la evacuación de las aguas pluviales, controlará la cantidad y calidad del agua que fluya por el mismo durante los episodios de lluvia; fomentará la biodiversidad del arbolado y contará con pavimentos permeables, explicó la ingeniera Martínez.
El concejal de Urbanismo subrayó que era la primera vez que se utilizaban sistemas de infiltración de aguas y de laminación, con un retorno de 48 horas, para prevenir las inundaciones.
El Ayuntamiento cerró el trato con los propietarios de algo más de 20.000 metros cuadrados en febrero pasado, a los que abonará 87.194 euros
Si uno de los hitos a conseguir era la autorización de la CHS para construir la pasarela sobre el río desde el Parque Oeste, otro era cerrar la expropiación de los terrenos privados afectados por la obra.
El alcalde, José Antonio Serrano, indicó que el proyecto de expropiación definitivo irá al Pleno de mayo para su aprobación (aunque estaba previsto que pasara por este requisito en febrero pasado) y que, tras cumplir este requisito, se procederá al acondicionamiento de los terrenos.
La Comisión de Urbanismo del pasado febrero dio luz verde a la adquisición definitiva de 20.265 metros cuadrados por un importe final de 87.194 euros, tal y como se informó en su día desde el Consistorio capitalino.
Este proyecto se ha hecho mediante el sistema de ocupación directa/expropiación por tasación conjunta y afecta a 14 parcelas en la primera fase del parque, que se ubicará en esta barriada. Estos 20.000 metros cuadrados se suman a los otros 20.000 metros cuadrados que ya tiene en propiedad el Ayuntamiento de Murcia
El presupuesto inicial para estas expropiaciones era de 678.000 euros; la diferencia, 591.000 euros, se aprovechará para futuras expropiaciones, según fuentes municipales. Este abaratamiento respecto a las previsiones iniciales se logró porque «prácticamente todos los propietarios de las parcelas sometidas a expropiación han optado por el sistema de ocupación directa, con lo que se reservan los derechos urbanísticos que les corresponden, de manera que las indemnizaciones solo se refieren a derechos de ocupación», explicó en su día a LA VERDAD el concejal del ramo, Andrés Guerrero, tras la reunión de la Comisión de Urbanismo.
Fuente: La Verdad de Murcia