La Guardia Civil de la Región de Murcia, en el marco del ‘Plan para la Defensa del Patrimonio Histórico Español’, ha desarrollado la operación ‘QANTARA’, una investigación que se ha saldado con el esclarecimiento de un delito de daños en el Acueducto Las Zorreras de Alcantarilla y la instrucción de las correspondientes diligencias a un menor de edad en calidad de investigado por delito de daños contra el Patrimonio Histórico.
El pasado mes de junio, la Guardia Civil inició la operación a raíz de una denuncia presentada por la Asociación Histórico Cultural de Alcantarilla “Legado”, en la que informaba de la realización de un total de ocho pinturas tipo graffiti en el Acueducto de las Zorreras, situado en el término municipal de Alcantarilla.
El acueducto está datado en el periodo alto medieval y, por ello, goza desde el año 2010 de la protección que le otorga su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC), con catalogación de Monumento. Su propietario, la Junta de Hacendados de la Huerta de Murcia, al tener conocimiento de los hechos, como persona jurídica perjudica, también se adhirió a la denuncia interpuesta.
Con el objetivo de esclarecer el hecho delictivo y debido a la dificultad que entrañaba llegar hasta los autores de las pintadas, la Guardia Civil solicitó la colaboración de la Policía Local de Alcantarilla y del Equipo Antigraffiti de la Policía Local de Murcia.
A partir de ese momento se fijó una fluida colaboración entre ambos cuerpos que permitió estrechar el cerco sobre los posibles autores y obtener un resultado positivo gracias al minucioso estudio y análisis tanto de los graffitis como de las bases de datos y ficheros.
La línea de investigación partió de los graffitis pintados sobre los lienzos del Acueducto. Se trataba de un icono identificativo propio del autor: su tag o firma. En este caso firmaba con la palabra “BUCK”.
Paralelamente al desarrollo de la operación se sorprendió a un menor de edad en las inmediaciones de una empresa de la pedanía murciana de Espinardo cuando realizaba unas pinturas tipo mural, cuya temática era el nombre de BUCK.
En ese momento se le intervinieron una quincena de botes de pintura tipo spray, así como una carpeta en la cual recopilaba una serie de bocetos o modelos, en los cuales se mostraba diferentes posibilidades de realizar murales, siempre con el mismo nombre como ejemplo. En ese momento ya manifestó a los agentes que él era quien firmaba los graffitis realizados en la capital y alrededores con el tag de BUCK.
Fruto de la estrecha colaboración, la Policía Local de Murcia informó a la Guardia Civil de la identidad del joven que supuestamente firmaba con el mismo tag que las pintadas del acueducto. En ese momento, los investigadores de la Benemérita iniciaron una serie de actuaciones, cuyos resultados finales han llevado a recabar los indicios suficientes para instruir diligencias al menor como presunto autor de delito de daños contra el Patrimonio Histórico.
En la mayoría de las ocasiones, la realización de una pintura tipo graffiti sobre un inmueble se tipifica como un simple deslucimiento del bien en cuestión, siendo sancionado por ello a nivel administrativo. En este caso, al llevarse a cabo sobre un monumento, el daño podría ser irreparable y aún llevando un proceso minucioso de restauración realizado por expertos, la estructura interna del bien cultural quedaría dañada, una circunstancia sitúa estos hechos dentro del ámbito penal, al ser catalogado como un delito de daños contra los bienes que integran el Patrimonio Histórico Español.
El investigado y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición de la Fiscalía de Menores de Murcia.
La operación está enmarcada en el ‘Plan para la defensa del Patrimonio Histórico Español’, puesto en marcha por la Guardia Civil y que lleva consigo la realización de dispositivos específicos de servicio al objeto de incrementar la seguridad del Patrimonio Histórico Español y reducir la actividad delictiva en este sector.
Fuente Alcantarillatv.es